La colección de Christian Lacroix de la semana de Alta Costura de París para mi gusto ha sido una de las mejores. Cuando ví los reportajes no me dejó indiferente, de hecho me encantó el colorido, los aires flamencos de sus volantes y lunares, la inspiración étnico africana, los collares estilo indígenas....es como un repaso por las esencias más fuertes del mundo, por las razas y las mezclas culturales más representativas de la raza humana.
Pero esta reflexión es una parte del desfile porque la otra está repleta de vestidos, faldas, que nos trasladan a la Belle Époque; brocados y los barrocos colores del Mediterráneo -amarillos satinados, azul glaciar. Sin lugar a dudas la mezcla de estilos que resulta exultante para la vista y sensible para el gusto.
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